El aislamiento térmico es uno de los aspectos más importantes en la construcción y rehabilitación de edificios, ya que los aislantes térmicos para paredes permiten mantener el calor en invierno y el frescor en verano. Existen diferentes materiales, técnicas y configuraciones que influyen en el resultado final, así que en esta guía de Acrobatica analizamos los tipos de aislamiento más utilizados, cómo instalarlos y qué factores hay que tener en cuenta para elegir la mejor solución. ¡Sigue leyendo!
¿Qué características debe tener un buen aislante térmico para paredes?
Los aislantes térmicos para paredes de calidad deben reunir una serie de propiedades que garanticen su eficacia, durabilidad y compatibilidad con las condiciones del entorno. Entre las más importantes se encuentran:
- Baja conductividad térmica: cuanto menor sea, mayor será la capacidad del material para resistir el paso del calor.
- Alto valor R: indica la resistencia térmica del aislamiento. Un valor alto significa un mejor rendimiento.
- Resistencia al fuego: fundamental para garantizar la seguridad del edificio.
- Transpirabilidad: permite que el muro “respire” evitando condensaciones y humedades.
- Aislamiento acústico: algunos materiales también aportan aislamiento sonoro, mejorando el confort interior.
- Sostenibilidad: preferencia por materiales reciclables o de bajo impacto ambiental.
- Durabilidad y estabilidad: el material debe conservar sus propiedades con el paso del tiempo.
- Fácil instalación y mantenimiento: importante para reducir costes y tiempos de obra.
Materiales aislantes térmicos más utilizados para aislar paredes
A continuación, analizamos los principales materiales empleados en el aislamiento exterior de muros y fachadas, sus características, ventajas e inconvenientes, así como su uso más común en proyectos de construcción.
Además, los sistemas de aislamiento pueden aplicarse en forma de paneles rígidos, productos proyectados o mediante soplado, según las características del edificio.
Poliestireno expandido (EPS)
El poliestireno expandido (EPS) es uno de los aislantes más extendidos por su ligereza y bajo coste. Está compuesto por pequeñas perlas de poliestireno unidas entre sí, con un alto contenido de aire que le otorga gran capacidad aislante.
- Usos comunes: ideal para sistemas SATE y para aislantes térmicos para paredes exteriores.
- Ventajas: económico, fácil de instalar y con buena resistencia térmica.
- Inconvenientes: menor resistencia a la humedad y al fuego.
- Coste aproximado: entre 10 € y 20 €/m² según densidad y espesor.
Poliestireno extruido (XPS)
Otra opción de aislantes térmicos para paredes es el XPS es similar al EPS, pero con una estructura más densa y cerrada que mejora su impermeabilidad. Es muy resistente a la compresión y a la humedad, por lo que se utiliza en fachadas exteriores.
- Usos comunes: fachadas ventiladas y cerramientos expuestos a humedad.
- Ventajas: alta durabilidad, fácil corte e instalación, buena impermeabilidad.
- Inconvenientes: menor transpirabilidad y comportamiento medio frente al fuego.
- Coste aproximado: entre 15 € y 25 €/m².
Espuma de poliuretano
La espuma de poliuretano proyectada forma una capa continua sin juntas, lo que evita puentes térmicos y fugas de calor. Se aplica directamente sobre el soporte y se adhiere con fuerza a cualquier superficie.
- Usos comunes: rehabilitaciones, cámaras de aire o fachadas irregulares.
- Ventajas: excelente sellado, buena relación grosor/rendimiento, reduce infiltraciones de aire.
- Inconvenientes: menor transpirabilidad y necesidad de aplicación profesional.
- Coste aproximado: 20 €–35 €/m².
Lana de roca
La lana de roca es un aislante térmico para paredes mineral fabricado a partir de roca basáltica fundida. Posee excelentes propiedades térmicas, acústicas y de resistencia al fuego.
- Usos comunes: aislamiento de fachadas, paredes interiores y (aislamiento de terrazas) cubiertas y cornisas.
- Ventajas: alta transpirabilidad, resistencia al fuego y absorción acústica.
- Inconvenientes: más costosa que los materiales sintéticos.
- Coste aproximado: 20 €–40 €/m².
Lana de vidrio
Similar a la lana de roca, la lana de vidrio se obtiene fundiendo vidrio reciclado. Su estructura fibrosa atrapa el aire y actúa como barrera térmica y acústica.
- Usos comunes: cerramientos interiores y sistemas de trasdosado.
- Ventajas: económica, ligera y resistente al fuego.
- Inconvenientes: puede irritar la piel durante la manipulación, menor resistencia a la humedad.
- Coste aproximado: 10 €–25 €/m².
Celulosa insuflada
La celulosa insuflada se compone de papel reciclado tratado con sales de boro, lo que le confiere resistencia al fuego y a los insectos. Se aplica mediante un sistema de soplado que permite rellenar completamente la cámara de aire, logrando una capa homogénea y continua sin necesidad de desmontar paredes.
- Usos comunes: rehabilitaciones y mejora de muros con cámara.
- Ventajas: ecológica, transpirable y de aplicación rápida.
- Inconvenientes: requiere maquinaria específica y profesionales cualificados.
- Coste aproximado: 15 €–30 €/m².
Corcho natural
El corcho natural procede de la corteza del alcornoque y es uno de los aislantes térmicos para paredes 100 % renovable. El corcho expandido se obtiene al aplicar vapor y calor al corcho granulado, logrando paneles más resistentes y duraderos.
- Usos comunes: muros exteriores e interiores, sobre todo en proyectos sostenibles.
- Ventajas: ecológico, transpirable, resistente a la humedad y muy duradero.
- Inconvenientes: precio más alto y menor disponibilidad.
- Coste aproximado: 25 €–45 €/m².
Aislantes ecológicos innovadores
Existen nuevas opciones sostenibles que combinan buen rendimiento térmico con bajo impacto ambiental:
- Fibra de madera: excelente comportamiento térmico, alta transpirabilidad y resistencia a la compresión.
- Algodón reciclado: buena absorción acústica y baja conductividad.
- Cáñamo y lino: naturales, ligeros y biodegradables.
- Paneles de celulosa compactada: fabricados a partir de papel reciclado y fibras vegetales.
Recomendaciones según el tipo de pared y necesidad
La elección de los aislantes térmicos para paredes más adecuados no es una decisión universal ni puede tomarse a la ligera, ya que cada edificio presenta unas condiciones únicas que influyen directamente en su rendimiento energético. Factores como la orientación de la vivienda, el tipo de muro o fachada, el clima de la zona, la presencia de humedad, o incluso el presupuesto disponible pueden determinar qué aislantes térmicos para paredes son los más eficiente en cada caso.
Por ejemplo, no es lo mismo aislar una vivienda antigua con muros de piedra que una construcción moderna con cerramientos de doble hoja. Del mismo modo, las soluciones para una zona fría y húmeda del norte no serán las mismas que las recomendadas para un entorno seco y caluroso del sur.
Por ello, si hablamos de aislantes térmicos para paredes, es fundamental analizar detenidamente el punto de partida del edificio (su estructura, materiales y estado actual) y valorar si se busca aumentar el confort térmico, reducir el consumo energético o mejorar el aislamiento acústico. A partir de ahí, pueden seleccionarse los materiales más convenientes en función de su conductividad térmica, transpirabilidad, resistencia al fuego o sostenibilidad ambiental.
A continuación, se detallan las opciones más recomendables según las distintas situaciones constructivas y las necesidades de cada proyecto.
Climas fríos
En zonas de bajas temperaturas se prioriza la conductividad térmica baja. Los materiales más eficientes son la lana de roca, el XPS y la espuma de poliuretano, que ofrecen una alta resistencia térmica con espesores moderados.
Áreas con alta humedad
En regiones húmedas o con riesgo de condensación se recomienda utilizar materiales impermeables y transpirables, como el XPS, la lana de roca o el corcho natural.
Paredes interiores
Para interiores, la lana de vidrio y la celulosa insuflada son opciones ligeras y económicas, además de proporcionar un buen aislamiento acústico.
Paredes exteriores
El EPS, el XPS y el corcho natural son los más habituales para sistemas SATE o (revision de) fachadas ventiladas, ya que resisten bien la intemperie y los cambios térmicos.
Presupuestos ajustados
El EPS y la lana de vidrio son materiales accesibles que ofrecen una buena relación calidad-precio.
Proyectos ecológicos
El corcho natural, la celulosa insuflada y los aislantes ecológicos innovadores destacan por su sostenibilidad, transpirabilidad y bajo impacto ambiental.
¿Por qué es importante elegir bien el material aislante?
Seleccionar los aislantes térmicos para paredes adecuados es esencial para garantizar la eficiencia energética, el confort y la durabilidad de un edificio. No basta con elegir un material, sino con valorar su conductividad térmica, transpirabilidad, resistencia al fuego y estabilidad.
Desde Acrobatica, aplicamos sistemas de aislamiento de alto rendimiento adaptados a cada proyecto (fachadas ventiladas, muros exteriores o medianeras) mediante trabajos verticales sin andamios, que aseguran precisión, rapidez y seguridad. Nuestra experiencia nos permite ofrecer un servicio técnico integral, con materiales certificados y resultados duraderos y eficientes.
Preguntas frecuentes sobre materiales aislantes térmicos para paredes
¿Qué aislante térmico es más eficiente?
Un aislante reflectante de aluminio es un tipo de material térmico que no actúa por espesor ni densidad como la lana mineral o el XPS, sino por reflexión del calor radiante. Por su parte, la lana de roca y el XPS destacan por su baja conductividad térmica y su durabilidad, por lo que son las opciones más eficientes a largo plazo.
¿Qué material aislante es más barato?
El EPS y la lana de vidrio son los más económicos, con un coste por metro cuadrado inferior al de otros materiales de similar rendimiento.
¿Cuál es el mejor aislante ecológico?
El corcho natural y la celulosa insuflada son las alternativas más sostenibles, al ser reciclables, transpirables y de baja huella ambiental.
¿Qué material ofrece mejor aislamiento acústico y térmico?
La lana de roca combina un excelente aislamiento térmico con una alta absorción acústica, siendo ideal para fachadas en zonas urbanas o de tráfico intenso.
¿Hay materiales aislantes resistentes a la humedad?
Sí. El XPS, la espuma de poliuretano y el corcho natural presentan buena resistencia a la humedad y son adecuados para climas húmedos o muros en contacto con el terreno.
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